Es un Concejo del Valle de Esteribar y la capital administrativa del Valle. Cuenta con una población de 478 habitantes (2020). Se sitúa a una altitud de 526 m. y a 20 Km. de Pamplona. El término confina al N. con Saigós, al E. con Agorreta, al S. con Urdániz y al O. con Leránoz, la mayor parte de la población en la margen derecha del río Arga.

Por su término discurre el Camino de Santiago, siendo fin de la Primera Etapa de este conocido itinerario. Como capital del Valle cuenta con numerosos servicios: Escuela de Primaria, Polideportivo Municipal de Esteribar que ofrece diferentes servicios deportivos. Sus industrias artesanales de producción de embutidos son muy conocidas por la calidad de sus productos. La población cuenta con Consultorio Médico, Oficina de Turismo (abre en temporada), Farmacia, Estanco, Hostería, Hotel. Banco, Peluquería, tiendas de alimentación, Taller Mecánico y un Servicio de Fisioterapia y Osteopatía. Hostería, Hotel, Albergue Municipal y diversos albergues privados.

Fue antigua villa de señorío realengo cuyos vecinos debían a título de «cazadores» una pecha anual (1427) de 30 sueldos más 10 cahíces de avena. Quizá estaba en su término el «monasteriolo» dado por el rey García Sánchez el de Nájera (1040) a la abadía de Leire. Santa María de Roncesvalles adquirió (1382) el molino del lugar.

En 1802 funcionaba un molino harinero sobre el Arga y gobernaban el lugar hasta las reformas municipales de 1835-1845 el diputado del valle y un regidor del pueblo, que se designaba por turno entre las casas (catorce útiles y una arruinada en esa fecha de comienzos de siglo; catorce vecinos y también en 1850). En esta última fecha contaba con escuela, la dotación de cuyo maestro consistía en el medio robo de trigo que le daba al año cada uno de sus alumnos. El derecho de presentación del párroco lo ejercían los vecinos; junto a la agricultura, «se ejercen los oficios más indispensables en la vida social». A comienzos del siglo XX, Zubiri tenía dos posadas.

Iglesia de San Esteban Protomartir se construyó en el siglo XIX al quedar la antigua muy maltratada tras la contienda carlista. El retablo mayor se trajo de la parroquia de San Agustín de Pamplona y corresponde al estilo barroco de mediados del siglo XVIII.

El puente medieval de la Rabia que da nombre al municipio, Zubiri en euskera significa “el pueblo del puente”, salva el curso del río Arga. También conocido como puente de la Rabia ha sido testigo hasta hace unos años de una singular tradición: se obligaba a los animales a pasar alrededor de su pilar central para evitar la rabia, pues según cuenta la leyenda ostenta ese poder sobrenatural. Las propiedades curativas se sentían cuando un animal rondaba el pilar central del puente tres veces y se atribuían al descubrimiento entre sus piedras de los restos mortales de Santa Quiteria (abogada contra la rabia). Por este puente se accede a la población desde el camino que llega de Roncesvalles.

Aunque el urbanismo de este pueblo se ha transformado recientemente, sin embargo, conserva alguna casa representativa Txantxorena, si bien tardía, ya de finales del siglo XVIII.

Fuente de Batueco. Caracterizada por su olor a huevos podridos, resultado del sulfuro de hidrógeno que contiene su agua. Según Joaquina Navarro (Galdurotz 1894) en testimonio recogido por Koldo Artola (Aranzadi): En víspera de San Juan, cuando las campanas de Zubiri tocaban las 12, la gente de todo el valle la utilizaba para tratarse diversas dolencias de la piel, como eczemas o granos. Después debían beber de esa agua todas las mañanas durante nueve días. Durante esa noche de San Juan también saltaban grandes hogueras, mientras gritaban: “Sarna kanpora, Jende ona etxera” ( sarna fuera, la gente buena para casa).

En su término se encuentra la Industria fabricación de productos derivados de la magnesita MAGNA perteneciente a la Multinacional Groupe Roullier.

Se celebran la primera semana de agosto en honor a San Esteban.